Al llegar el frío, viajar a la nieve es lo primero que se nos pasa por la cabeza, pero para poder disfrutar de una estancia agradable es imprescindible ir bien equipado; y no solo es importante el material propiamente dicho de esquiar, las tablas, botas, bastones... si no que elegir bien la vestimenta, las gafas y la protección solar marcará la diferencia entre pasarlo muy bien y volver a casa con un resfriado.
- Las gafas. Esenciales; podemos decantarnos por unas gafas de sol normales, a las que añadiremos un cordón por el evidente peligro de pérdida. Si preferimos las gafas de ventisca, nos fijaremos en que sean de doble lente. Esto hará que haya un espacio entre ambas y así no se nos empañen. Os mostramos este modelo de Decathlon, el más económico de doble lente.
- Parte superior. Está muy extendida la creencia de que cuanta más ropa llevemos más nos protegemos del frío, pero en este caso debemos hacer más caso a la calidad y no a la cantidad. Hay que recordar que esquiar es un deporte, y como tal provocará que aumente nuestra temperatura corporal, por lo que acumular muchas capas de ropa llevará a que el sudor se acumule y que en momentos de descanso, o subiendo en el telesilla ese sudor se enfríe y es entonces cuando nos resfriamos. Así pues recomendamos:
- Una primera capa, compuesta por una camiseta transpirable, que saque el sudor fuera de nuestro cuerpo.
- Una segunda capa, que consistirá en un forro polar, que nos aportará el calor necesario.
- Una tercera capa, que será una chaqueta impermeable, ya que será habitual que nieve o que llueva.
- No nos olvidemos del cuello, que nos lo protegeremos con una braga de forro polar, o de un material más fino, lo importante es que el frío no llegue a la garganta.
La calidad y en definitiva el presupuesto de la indumentaria, dependerá del lugar y la época del año donde vayamos, ya que si vamos a los Alpes en pleno invierno, tendremos que prepararnos con lo mejor, y si vamos a una estación que está a menor altura y en primavera, nos bastará con los modelos básicos de Decathlon o incluso de Lidl, que periódicamente promociona la semana de la nieve. Os mostramos unos modelos mínimos de Decathlon.
- Parte inferior. El pantalón de nieve. Es muy importante que el pantalón sea específico para esquiar, esto significa que si se nos pasa por la cabeza esquiar con chándal o vaqueros, mejor olvidarlo. Hoy en día hasta los modelos más básicos de las colecciones de Lidl y Decathlon que hemos comentado, nos protegerán sobradamente. Aquí tenéis el más económico de Decathlon.
- Calcetines. A veces tendemos a olvidarnos de esta prenda, o pensar que cualquier calcetín deportivo es suficiente, pero quizá es aquí donde os recomendamos tener más cuidado, ya que debemos llevarlos altos para que cubran toda la zona que tocará la bota, de buena calidad para que el pie no sufra y varios pares, sobre todo si las botas de esquiar son de alquiler, ya que tenderán a encharcarse. Os mostramos el modelo básico de Decathlon.
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